Una gran parte del envejecimiento está vinculada a nuestro estilo de vida el ritmo de vida, el estrés diario, los contratiempos y los hábitos no recomendables de todo tipo.
Estos factores provocan un desajuste en el ciclo de vida biológico de las células, ya que alteran gravemente su ritmo, energía y longevidad naturales. Todos ellos dejan una marca más profunda en nuestro rostro que el envejecimiento programado genéticamente. el tratamiento antiedad por excelencia, reconocido por su acción sobre las manifestaciones cutáneas del envejecimiento intrínseco, incorpora ahora los últimos avances científicos en el campo del envejecimiento vinculado al estilo de vida para ofrecer una respuesta antiedad absolutamente integral.